Rincones de España protagonizados por el agua
23 Octubre 2013
Todos tenemos un rincón especial en nuestra ciudad pero hay muchos otros por descubrir que también pueden llegar a serlo si somos capaces de disfrutar de lo que los hace diferentes. Prepárate para una escapada y déjate atrapar por los rincones de España que hemos recopilado para ti. Todos tienen en común el agua, pero no tendrás que llevar paraguas.
El agua tiene un efecto relajante en muchas personas, y más si se trata de un sitio poco frecuentado como puede ser el nacimiento de un río. El del Río Mundo en Albacete, el Pozo de los Humos en Salamanca o el del Río Cuervo en Cuenca, son algunas visitas no muy conocidas pero recomendadas por su paisaje y por las impresionantes cascadas que las caracterizan.
Por otra parte, los lugares en los que los ríos se unen con el mar, también resultan muy atractivos. El delta del Ebro es un espacio natural lleno de vida y el estuario del Miño desde Castro de Santa Tecla en Pontevedra resulta un lugar con un encanto especial. En ambos, el sol juega al escondite en sus marismas.
La erosión del agua también crea espectaculares rincones repartidos por toda España. Verdaderos abismos como los de Castellfollit de la Roca en Girona o la Cornisa del Tajo en Ronda permiten asomarse a precipicios que parecen mostrar el mismísimo fondo de la tierra. Y sin escalar, accesibles fácilmente en una ruta en coche.
Los ríos también forman parte de la historia de lugares como Setenil de las Bodegas en Cádiz, donde las rocas cubren las calles como si fuesen tejados naturales, o los Mallos en Huesca, con formaciones rocosas verticales formadas por sedimentos y su posterior erosión que empequeñecen las casas de los pueblos que las rodean.
La ausencia de agua también consigue asombrosos paisajes naturales. Las semidesérticas Bardenas Reales de Navarra o las Salinas de Imón en Guadalajara no te dejarán indiferente. Así como embalses que bajan de nivel y dejan descubrir sus secretos como El Burguillo en Ávila o Belesar en Lugo. El desierto de Tabernas en Almería es otro ejemplo de paisaje más árido provocado por la ausencia de agua, pero que no deja de tener su encanto especial.